Respeto, Derechos Y Equilibrio Social

Opino que no solo por fan ticos sino hasta por creyentes moderados de todas las iglesias ser v ctima de todo tipo de insultos y cr ticas por el m todo de proyectar mi intenso perfil ateo, incluso por la crudeza de exponer la realidad Cat lica. Asimismo por una parte de los Cubanos del exilio ser hasta calumniado por mi forma de interpretar el v nculo de uni n y comunicaci n que en congruencia con mi experiencia y convicci n asumo que en Cuba existe siendo que lo fuertemente relaciona a pueblo/gobierno, pero estoy seguro que muchas m s personas estar n escandalizados por la igualdad de prejuicios y beneficios en relaci n con la moral/sexual que yo opino debe coexistir entre hombres y mujeres, pero aun as y sin importar las consecuencias de mi arrojo, conmovido por el respeto y amor que la mujer merece, es lo que me ha motivado a escribir este libro, que no obstante a las opiniones negativas que con mi libro yo pueda generar, porque m s all de justicia, en honor al reconocimiento de la verdadera condici n humana (sin importar que yo sea Liberal o Conservador, Religioso o Ateo, Realista o Idealista) nadie podr ignorar o negar la irrefutable verdad que hay en mi escrito, tanto en honor y agradecimiento a la mujer, como a la equidad y demanda evolutiva social. Tambi n est la necesidad de un impostergable y radical cambio para establecer alg n equilibrio, que si no disipa, aunque sea minimice la vulnerabilidad colectiva y personal que a la mujer azota en lo que concerniente equilibrio moral/sexual, porque debido a como los oportunistas y extremistas disfrazan y prostituyen la honestidad, es lo que provoca esa discriminaci n, consecuencias y prohibiciones de sociedades retrogradas, la cual por dignidad y pudor, inconsciente e involuntaria la mujer asume, limitando o dificultando la libertad y derechos de realizarse sin prejuicios acorde lo que pueda y quiera, ya sea en repuestas a sus deseos o necesidades, como tambi n ante un evento de traici n o cinismo, sin antifaz act e motivada por represalia; reconocimiento que dentro de un contexto de igualdad social, tanto de ley natural como legal, lo considero un derecho fundamental para ambos g neros.