Si no me llamara Fernando

C mo dimensionar a quienes nicamente saben que son poetas sin ni siquiera conocer su propio nombre? Se confunden estos con los de quienes aspiran a ser poetas pero siempre intercalan sus nombres en listas ajenas? O con aquellos que no son poetas pero sue an con hacerse un nombre? O con quienes ni conocen su nombre ni tampoco son poetas? O tal vez con quienes saben o intuyen que el verdadero ser no tiene nombre y por eso les importa un bledo no ser poetas ni tener nombre? Como todos los textos cu nticos, los de este libro son poemas y al mismo tiempo son girones desgarrados de una piel de lent simas urgencias; est n aqu pero tambi n en otra parte, pues apuntan al mismo tiempo a ser le dos y a borrarse en otros ojos. Por supuesto, nada de esto ser a as si quien los escribe no se llamara
Fernando Valerio-Holgu n.

M nica Volonter